lunes, 31 de octubre de 2022

TODOS LOS SANTOS 2022 — RECORDAD QUE…

 

Sucumbamos, hay que admitirlo,
a la pequeña hipocresía de la
fecha; empero quede claro que
es por un motivo promocional
(aparte de una tradición que se
remonta a 2012, lo menos)

…esta fecha es una mística pagana que la TV y series estadounidenses nos han metido por los ojos y que, depreciando nuestro criterio autóctono, se ha adoptado pensando en qué esparcimiento produce. España es país donde todo quiere celebrarse, sin discriminar si es nacional o importado. Se celebra.

Ergo vemos tiendas decoradas con esqueletos de cartón y RUPERTAS infernales (quiero decir, calabazas) que sonríen con maliciosa intención. Supongo que es un efecto de la globalización. Respuesta, por otra parte, a tener que ir mañana al cementerio a ver frías lápidas, que era lo nuestro.

[Nunca entendí, de niño, a qué venía lo de ver piedras escritas en un lugar que invita tan poco a la celebración de la vida, que los teólogos menos recalcitrantes dicen que es a lo que estamos destinados.]

Lo que en el fondo vengo denunciando desde hace años es:

Halloween es una celebración religiosa celta que, según nuestros estándares cristianos, se considera pagana. Mas: RELIGIOSA. Los ateos que hoy pierden el culo festejando Halloween luego dinamitan cuanto pueden la Navidad por ser obra RELIGIOSA. ¿Adónde queda tu puñetera coherencia, memo? ¿Celebras el religioso Halloween, empero condenas la Navidad, por idéntico motivo?

Así nos va.

domingo, 2 de octubre de 2022

LA MODA — DE LAS ARMAS DESCOMUNALES

 

Boceto de los que haces en un
ratillo; para captar la idea. De todos
modos, el bocadillo deja clara la
intención del concepto

De tantas, detesto dos manías; una la referí hace años. Es la de que imaginar un personaje barbárico-femenino y, de cajón, ¡otra RED SONJA! Mira que hay amazonas, como WONDER WOMAN, a las que intentar emular, sacarle vueltas que alguna puede haber aún. No: siempre sale la Red Sonja que llevamos dentro para llevar el asunto al actual extremo de estomagante mediocridad. Ese sigul delata que ese autor va bastante limitado de ideas. Sácalo del bikini de cota de mallas y la fiera mirada enmarcada en rizos rojizos, y puede quedarse in albis mirando el A3.

Dentro de esa tendencia al barbarismo pelirrojo medio nudista-bikini metálico, está la segunda aborrecible manía de dibujar a la pobre manejando un hacha de tamaño poco menos que ABSURDO. Por fuerte que esté (o sea, gana músculos empero sacrifica su femineidad, porque adquiriría talla andrógina —una delicia sáfica—, que no suele reflejarse en esos diseños), no creo que una mujer pueda emplear un hacha que pese más de cincuenta kilos después de tres o cuatro golpes. Y sólo el esfuerzo de alzarla, voltearla, descargarla, brindaría a sus rivales tales huecos en su defensa que, cuando menos, la cuchillada al costado estaba garantizada.

Vale, es una fetishfantasía, mas hasta las ficciones deben seguir una lógica intrínseca. Y a menos que seas de Krypton y nuestro Sol amarillo haya superfortalecido tus músculos y sentidos, una bárbara, por bárbaros que sean sus tiempos y bárbaro su entrenamiento, acabaría derrotada en cualquier pelea usando tal hacha.

Parece, asimismo, una nueva versión de la envidia del pene (hay cierta alusión sexual masculina en el hacha). Espadas largas. Hachas masivas. Mazas enormes. Un complejo de inferioridad (más que una razonable medida defensiva/ofensiva) que hay que vencer empleando quincalla de tales dimensiones que (pen)entran en lo absurdo de todas-todas.

Ciñámonos a la lógica, aunque sea la volátil que envuelve las fantasías, autores.