miércoles, 21 de mayo de 2025

CABALLEROS DE FORTUNA – READY REAPER — ¡BIEN PRONTO!

 

LA BELLE DAME SANS MERCY
tendrá un papel harto activo en los
espectaculares sucesos que realta
la vibrante novela

«Gesté» Caballeros De Fortuna - Ready Reaper a finales de 1992. Durante estos años he modificado (actualizado) diversos aspectos principales. Empero del manuscrito original reconozco sólo queda la idea esencial que anima la novela, de inminente publicación por la editorial YERAY.

La rescaté en 2004 titulándola LOS IMPERIOS PERDIDOS, donde dejé establecida como importante vértebra de la historia el trasfondo político de tensiones entre grandes imperios (a la vista; ocultos-ocultistas).

Ready Reaper (recuerdo hay varias novelas escritas de Caballeros de Fortuna) repite la fórmula que sorprendió a los editores de SOGUETTO por su inédito planteamiento: la Guerra Fría, la fricción Bloques Este-Oeste; al parecer, la idea dormía en un remoto limbo dentro de la ciencia ficción.

Ésta parece haberse dedicado a otros (cyber)asuntos; peor aún: me comentan que, en los últimos tiempos, son WOKEasuntos, no narraciones propiamente dichas del género, sino dogma y adoctrinamiento. (A ver cuánto tardan esos apóstoles en hacer apostasía de la fe que con tanto TANTO inquisitorial celo han predicado.)

La Guerra Fría se reproduce en Ready Reaper en el enfrentamiento del SACRO IMPERIO CATÓLICO HISPÁNICO con el IMPERIO CRISTIANO REFORMISTA DE ALBIÓN, amenazados por los retorcidos maquiavelismos del CELESTE IMPERIO de CATAY. Turbios elementos centroeuropeos procuran desestabilizar la hegemonía hispánica en el continente. Se defiende el Sacro Imperio empleando expeditivos agentes (como los protagonistas del relato) que garantizan la incolumidad de ese predominio.

¡SÍ! Hasta BIANCA BLAZE (a
la cual citan) aporta elementos de
gran trascendencia a la trama

Ready Reaper no es la usual ucro-steampunk; exhibe desafiantes aspectos innovadores que la desvinculan de esos subgéneros por completo. Ambos han entrado en decadencia, y cuanto hacen sus autores para sostenerlos (no revitalizarlos) es añadir más gafas de soldador y engranajes a sus párrafos. Nuevas versiones de SHERLOCK HOLMES.

Aunque agradezco exista esa monotonía que destaco: me indican qué camino NO DEBO TOMAR, instándome a seguir otras fascinadoras sendas.

Ahí delante atisbo algo todavía más espectacular esperando. Algo… atómico.