miércoles, 2 de marzo de 2016

¿CUÁNTAS RED SONJA CLÓNICAS PUEDE EL LECTOR SOPORTAR?

Tras ver todas esas RED SONJA, ¡este, salvando las distancias y comparaciones,
me parece el más audaz proyecto de cómic de la actualidad! ¡Adelante, BIANCA!
Sin ánimo de faltar, y con el elemental respeto que merece el trabajo desempeñado, que arropa suficientes ilusiones, no obstante el asunto es una "polémica" de cierto interés que merece somera especulación. Una de dos: o estamos ante una pobreza creativa generalizada, o es mal entendido instinto de mercado. Pero, si lo hacen así, es porque existe un nicho de lectores que aman esas historias. Lo cual sigue siendo preocupante.
¿Cuántas RED SONJA clónicas pueden obstaculizar el mercado, impidiendo el paso a otras propuestas? Porque el patrón que siguen esas andanzas es el mismo: una especie de GOR inverso, donde una marimacho con espada larga (ya empezamos con la envidia fálica) e instintos masculinos pretende despoblar la ERA HYBOREA (o su sucedáneo) imponiendo su ley; en cuestión de instintos: espera emular a CONAN, trajinándose al bárbaro de turno con taparrabos tieso de mugre porque… emulo a Conan, macho, ¿qué esperas?
Presenciado este constante y rendido “caimiento” a la figura de Red Sonja (que no era ni contemporánea de Conan, por cierto; pero la feroz hambre de MARVEL por acaparar series les hizo de la misma época), no puedo sino presentar esta reflexión. A ver, ¿qué tiene? ¿Tanta hambre de fem-dom hay entre los lectores? ¿Tanto necesitan lamer esas botas, o qué?
Y, mis caros creadores: ¿por qué otra Red Sonja, tenga el nombre que tenga? Cada día veo más valientes iniciativas como Bianca Blaze (por promocionarme, ¿vale?), que buscan, si no romper esa baraja, porque debe haber de todo, al menos proporcionar variedad, otra opción.