Una de las tantas portadas de una ficción que ha engullido al evento histórico en que se basa el personaje. Suele ocurrir |
El fallido intento del mercenario GUY
FAWKES de explosionar el Parlamento inglés, con sus ocupantes dentro (España le pagaba
—dinero bien invertido, de haber tenido éxito—), se inmortaliza como una
celebración más/menos contra el Sistema. (Lo chungo del Sistema es que le
NECESITAMOS, porque, policía o bancos aparte, el Sistema es también escuelas y
hospitales. Seguridad Social.)
Estamos en una sangrienta época electoral
(conste para la posteridad, del clima por tanto que anima esta entrada) donde
todo está disparatado y disparan en todas direcciones sin mirar víctimas
colaterales. Es el trágico resultado de los Tres Grandes Cánceres que asolan al
país: el republicanismo, los nazionalismos y los populismos (todos los “ismos”
letales). (Creo que dos de esos tumores son simbióticos; otros carcinomas a citar
serían la corrupción y el hipócrita cinismo de los políticos.) Imposible extirparlos,
impiden el auténtico y necesario progreso que la nación necesita.
Y aunque no lo parezca, caveat lector, esto está relacionado con
la fecha y V de Vendetta. Méritos
artísticos aparte (en su conjunto), tiene una única virtud política que NUNCA
sus acólitos le reconocen: desconfía de
los líderes. Fue la principal lección que saqué de su lectura, temporibus illis (cuando aquí nadie
sabía quién era ALAN MOORE).
Hay quien cree que su estructura política
puede aplicarse a la vida real. Funcionaría como Estado. ¡Absurdo! Estos
apóstoles de V (el de Vendetta) desprecian la tendencia humana a la envidia, la
corrupción, la inmoralidad. Piensan que, echando al Rey, poniendo una acracia
plena a pleno rendimiento, convertirán esto en Jauja al día siguiente, pues
todos los ciudadanos se comportarán formalmente, respetando el espíritu de
igualdad-solidaridad-fraternidad-legalidad del Nuevo Orden.
Los Dinamiteros de Sociedades deben recordar que, después, hay que reconstruir. Y a saber qué te encuentras bajo los escombros, y qué ensamblas después con ellos... |
No funcionó en Francia, cuna de todo esto. ROBESPIERRE modeló el futuro KGB. NAPOLEÓN ambicionó un Imperio Europeo
librando costosas guerras. ¿Y la igualdad-fraternidad-solidaridad-legalidad;
dónde quedaron?
Nuestros procelosos días lo son más por mor
de las bestias
inhumanas de los populismos de izquierdas. Buscando la desintegración de la
Unidad de España y la destrucción salvaje de sus principios constitucionales, todo
les vale. Todo “inspirado”, más/menos, por la máscara-que-sonríe y su viciado
predicamento. (¿A cuántos manifestantes has visto llevándola? ¿Saben
siquiera de qué va-de dónde sale? Estos son nuestros tiempos.)
Hablan de ayudar al necesitado populux,
cuando el populux necesitado les importa una mierda. Su angustia es su pretexto
para apoderarse del Poder y jamás soltarlo. (Pensad en STALIN & Cía.) Una
vez tengan las riendas, su Policía del Pensamiento nos pondría a palos en
marcha, con gulags u otras medidas de represión extras. En sus labios, las
palabras “democracia” o “libertad” son inmundas, están cargadas de veneno mortal.
Sólo recordad de V de Vendetta, que seguro inspira a más de una de estas alimañas,
una cosa: RECELAD DE LOS LÍDERES.