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| Repasando estos bocetos de hace un año, veo que hay una imagen que podría aún cuadrar mejor con el concepto entregado a la editorial. Espero pueda cambiarse |
Una… sugerencia me proponía una portada
minimalista para RUNNERS.
Trasladar una intriga, más que un mensaje. Excitar la curiosidad del lector, o interesado,
con una ambigua imagen misteriosa. Huir esta vez del elaborado barroquismo que contenía
la cubierta de LAS GRAVES PLANICIES, que exigía esa vez ser retablo de héroes
a la vieja usanza. El Arte merece su espacio. Y esa portada lo derrochó, junto
con el talento.
Empero ésta… esta debía ser diferente.
Elemental. La imagen que acompaña al texto muestra sin embargo que asimismo bosquejé
opciones más elaboradas, porque otra clave de la novela es el DOMOPLEJO, ese
colosal corral aislado autosuficiente donde realizan incesantes experimentos
sociales. A cada generación modifican la pedagogía; matraca nueva cada veinticinco
años. Pero no con la esperanza de obtener al fin el justo gobierno equilibrado que
siempre nos venden demagogos
y políticos demagogos.
Sucede por el malicioso capricho del que rige
los destinos de los habitantes ahí atrapados sin posibilidad de escapatoria o
disidencia. El imperante Dogma es inquebrantable y debe obedecerse
sin fisuras.
De todas esas líneas, prevaleció el concepto básico original.
