miércoles, 31 de julio de 2013

DIFÍCILES COMIENZOS — EL ANUNCIO DE H4PE, PÁGINA 2




De lo que más odio al dibujar es luego borrar el lápiz. Por alguna razón absurda, hay trazos que perduran pese a la energía que apliques trabajando con la goma de borrar. Y no puedes colarte; atravesarías el papel, o lo arrugarías.

Otra cosa que detesto son las excesivas líneas rectas. Dibujar muchos edificios y cosas así. La tinta tiene el feo defecto de no secarse a tiempo, o suficientemente deprisa, y un residuo, mínimo-nimio, queda ahí y, al empezar a borrar, o mover la regla para trazar la siguiente raya, ¡a manchar tocan! Cómo afea el trabajo.

Vuestro Scriptor.

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