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Más material promocional de la novela, en inminente venta |
El caveat lector de estos blogs sabe que “reciclo”
a mis personajes. Invento pocos nuevos porque van a hacer lo mismo, bajo otro
nombre. Por tanto, ¿a qué gente nueva? Además, tras tantos años, les conozco
bien. Son especialistas entrenados. Brindan confianza. Cambio su escenario y
veo qué tal les va.
Es experimento muy fructífero, porque hace
sus caracteres cada vez más humanos, más perfectos quizás, descubriendo detalles
de sus almas que ahora pueden estar ocultos si continúan unidimensionales en un
escenario determinado.
El elenco de Caballeros de Fortuna obedece
esta norma. Excita ver desenvolverse a personajes combatientes del brutal
Estado Mundial Dictatorial
PragmaSoc
en un entorno totalmente situado en las antípodas, como un mundo ucrónico de
comienzos del siglo
XIX impulsado por maquinaria steampunk. Es casi como descubrirlos de
nuevo, porque combatir la obscena Propaganda
de las dictaduras ‘progresistas’ no es igual que lidiar con la Fauna criminal
del saturado Londres Metropolitano de 1805DC. Exige otra forma de pensar.
Actuar.
Lo barroco de un entorno steampunk
ucrónico satisface mi actividad creadora gráfica. He rehuido empero recargar
los diseños. Llevan, en lo gráfico, en un tiempo reciente los personajes steampunk
tal aparato de chatarra broncínea y gafas sobre gafas de soldador que motiva
preguntarse sobre si pueden moverse con soltura siquiera.
Frankie Raines viene a ser un sutil
equivalente de DAMA DE PICAS. Aun gobiernan “en lo civil” el mismo prostíbulo,
salvo que el de Dama de Picas desapareció apenas el infante GABRIEL T quedó a
su cargo y desplegó todo su carácter maternal reprimido. Frankie aparece por
primera vez en LAS GRAVES PLANICIES, como una audaz piloto de caza que libra
a los acosados protagonistas de la novela del grave peligro en el que estaban.
Es cautivador personaje duro, apasionado, frío cuando corresponde. Lo demuestra al final de Ready Reaper, cuando además debe afrontar un negro futuro muy incierto. No le perdáis la pista.