Este año, más sexy
[Recordatorio:
Halloween es una fiesta RELIGIOSA, mas de origen pagano. Los laicos que
masacran Navidad por ser una fiesta RELIGIOSA, abrazan sin embargo esta fiesta
RELIGIOSA con toda naturalidad. Las hipocresías progresistas.]
Como escribiera en otra entrada: otro
festivo marcado por la puñetera plaga. Este año la hace más excepcional, porque
irse de juerga por ahí, a cosechar caries en calabazas de plástico en forma de
caramelos, o mínimo-nimio, o nanay. Y, los mayores, a celebrarlo encerrados con
tónicos más vigorizantes según arruinan disfraces que más/menos se hayan
currado.
Sigue desagradándome esta invasión televisivo-norteamericana
de Halloween. Nos han metido por los ojos lo del “truco-trato” y los disfraces,
más/menos currados, y nos hemos dejado colonizar sin lucha. Eso me irrita: esta
cordial invasión-impositiva. Nosotros no podemos trasladar, por ejemplo, ni la
Semana Santa, o Reyes Magos, a las graves planicies estadounidenses, donde fijo
miran tan antiguas tradiciones nuestras con mal disimulado rictus erectus
despectivo. Cosas de bárbaros. Primitivo. Inculto-incivilizado. Empero, bien debemos
transformar sábanas en astrosas túnicas de fantasmas para quemar timbres,
pidiendo un truco o tendrás un trato…
Aunque…, si pensamos en la versión patria
del 1º de Noviembre… la visita a los cementerios… este año asimismo reducida…
la contemplación de frías lápidas… No sé. Neblinosos días que, de alguna forma,
marcaron mi infancia. (Por eso lo refiero.)
En todo caso: no contribuya este festivo a
expandir la plaga.