domingo, 24 de octubre de 2021

¿Y SI…? — INTERESANTE TEORÍA

 

Afiche de una película que 
QUENTIN TARANTINO estima
la mejor filmada nunca. Como
mínimo, histórica es


Hace un rato en TV estuve viendo EL BUENO, EL FEO Y EL MALO, y consideré de un significativo detalle que ejecuta su protagonista “sin nombre” (al menos, en la cinta), CLINT EASTWOOD: ¿y si la celebérrima TRILOGÍA DEL DÓLAR estuviese invertida? Quiero decir: ¿y si la última (la citada al principio) fuese la primera, POR UN PUÑADO DE DÓLARES, la segunda, y LA MUERTE TENÍA UN PRECIO la final?

Veamos: EL RUBIO, personaje de Eastwood, se larga con su parte del botín robado enterrado en la tumba del desconocido, empero durante el trayecto, o en algún momento futuro próximo a los hechos, pierde sus cien mil dólare$. Esto le impulsa a huir a Méjico (por el motivo auxiliar que sea a la pérdida del dinero) y allí no le queda más que volverse sicario tornadizo ora de los BAXTER, ora de los ROJO, esperando aun así su oportunidad de agenciarse una pa$ta con la cual rehabilitarse.

Este plan (ya sabemos) fracasa finalmente y, de regreso a Estados Unidos, se hace un nombre siendo cazarrecompensas y termina volviéndose bastante rico con la eliminación (aunque tenga ayuda) de toda la banda de aquellos peligrosos piojosos comandados por el psicópata drogata de EL INDIO.

Los papeles de sus compañeros de reparto están más difuminados en mi reconstrucción. Tal la carrera de TUCO, el feo, lo mismo pronto derrocha sus ganancias y termina ahorcado, o tiroteado, saliendo entonces de cuadro para siempre. LEE VAN CLEEF sabemos muere en el duelo final, pero “reaparece” como CORONEL MORTIMER en La muerte tenía un precio. Curiosamente, interpreta a un oficial nordista a su vez reconvertido en cazarrecompensas, aunque con brillante historial marcial, no como el del nefario SARGENTO SENTENCIA de El bueno, el feo y el malo.

El detalle que me lleva a suponer todo esto es cuando Eastwood (hoy famoso gracias a filmes que tan renuente se mostró a protagonizar al principio), en El bueno, el feo y el malo cubre al moribundo sudista con su astroso abrigo y coge el sarape que le dio su popular imagen. ¿Iniciaba, por tanto, esta “cadena de acontecimientos” que he detallado mediante este gesto…?