lunes, 20 de mayo de 2019

“SUPERMANA”

La grandeza de la imagen no quita la cuestión que planteo en
la digresión

Acaso como addenda al comentario la última vez publicado, porque además la imagen lo sugiere, me surge contemplando esta estupenda ilustración de lo que se presume una SUPERGIRL ya más mayor (espero lo sea, no la “actualización” de SUPERMAN pero en fémina, que esa caída acabaremos teniéndola) una serie de dudas que espero plasmar en su totalidad en esta digresión.

Mientras la Sociedad se conciencia contra la otrora llamada “violencia doméstica”, y fuerzas descarriadas insisten Insisten INSISTEN en lo de la atávica maldad del hombre, negándole toda capacidad de bondad, reparación o remisión, aparece este problema no poco baladí. A saber: Supermana, en algún momento, deberá enfrentarse a hombres (a LEX LUTHOR, siguiendo la tradición) que la aporrearán a gusto sólo para descubrir que es invulnerable, funde cosas con su mirada calórica y les deja en humillante vergüenza al demostrar su superioridad frustrando sus desquiciados planes de conquista planetaria.

Será inevitable el conflicto con oponentes masculinos al demandarlo las viñetas; es su ley no escrita. ¿Qué pasará entonces? ¿Acusarán de machista al agresor, ergo, a la colección, por mostrar a un perverso hombre golpeando a una indefensa mujer indestructible? El sujeto ya es malo; es el malo. Actúa según su naturaleza. Supermana no puede esperar una pacífica rendición.

Por tanto: si tildan la colección de machista, será cancelada. Porque… ¿desarrollarán una hueste de supervillanas, una LEXA LUTHOR, para causar problemas? ¿Eso no sería igualmente sexista, pues demostraría que hay mujeres capaces de ser peores que los hombres satanizados (y la Propaganda morada-feminista afirma que eso es MENTIRA)? ¿Sufriría por tanto igual persecución que si un machote que huela a Old Spices (no a florecitas) zumba a Supermana? ¿En qué extraño limbo ideológico-paranoico deberían moverse los autores de la serie para no ofender al feminismo (ya que les importa un carajo afrentar a los hombres) y, al mismo tiempo, garantizar sus sueldos?

¿Estamos llegando a una parálisis de la creatividad por mor de unos escrúpulos sociales sobrevenidos-mal entendidos que pueden propiciar cazas de brujas que ríete tú de la de MCCARTHY? Tiene toda la pinta; que el delirio se consumará en fatales listas negras…